VISITAS EN MADRID 2018. 4ª Parte, TERMINAL DE ADIF DE ABROÑIGAL

09/04/2018

Así, sobre las 11,15 pudimos llegar a la Terminal de ADIF de Abroñigal. Allí fuimos recibidos por Ignacio Sanz Junoy, Subdirector Comercial de Servicios Logísticos de Adif y profesor del Máster, quien en una sala de formación expuso la última parte de su presentación del curso, la dedicada a las Infraestructuras Nodales Ferroviarias, que no otra cosa es la terminal de Abroñigal. El hecho de explicar lo que inmediatamente después se va a ver y recorrer, tiene indudables ventajas metodológicas, pues obviamente se fijan mejor los conceptos. Finalizada la clase, iniciamos el recorrido a pie acompañados por Juan María García, quien con su dilatada experiencia como mando directo en el día a día de la terminal, se convirtió en un estupendo y amabilísimo guía. No solamente comentamos todo acerca de las instalaciones sino que repasamos la evolución de los distintos modos de gestión con sus ventajas e inconvenientes, centrándonos más, lógicamente, en el modelo actual de gestión público-privado entre ADIF y la UTE adjudicataria de los servicios ferroviarios, mientras veíamos el movimiento incesante de las distintas composiciones en la playa de vías, el movimiento de camiones y grúas por viales y explanadas y la carga y descarga de contenedores. Como se sabe, la terminal de Abroñigal es en su género la mayor instalación intermodal de la península por tráfico y cuenta con una aduana en su interior con presencia de resguardo fiscal, única en Madrid. Ciertamente, observar in situ su operativa como “puerto seco” hace muy interesante la visita. Hubo tiempo, además, para contemplar el “tren de la fresa” y otros históricos que allí están estacionados a modo de complemento del Museo del Ferrocarril de Madrid.
Sobre las 14,30 dimos la visita por terminada y, pese al cansancio, la satisfacción era general, había merecido la pena el esfuerzo de estos dos días. Quienes volvíamos de regreso a Galicia nos dimos prisa para evitar coincidir con la operación salida del fin de semana. Varios de los expedicionarios, sin embargo, decidieron quedarse en Madrid o iniciar otro viaje desde la capital, al fin y al cabo teníamos una semana de margen antes de reanudar las clases.

Twitter Facebook

« Volver